Amigos, en el Evangelio de hoy Jesús le pregunta a Pedro tres veces si lo ama. Así, el Señor le dio a Pedro la oportunidad de reconciliarse con Él debido a su triple negación.
¿Qué significa “reconciliación”? Deriva del término cilia en latín que significa pestaña. Ser reconciliado es estar pestaña con pestaña con el otro, verse cara a cara, o verse a los ojos.
Los primeros cristianos vieron a Jesús como el cumplimiento de la esperanza de Israel. Él mismo era, en Su persona, la reconciliación de la divinidad y la humanidad. Es por ello que Pablo lo llama el nuevo Adán. Es por ello que la tradición doctrinal se refiere a Él como Dios verdadero y hombre verdadero.
Esta es también la razón por la cual Jesús se llama Soter, Salvator, Salvador. Él es el sanador de la grieta entre Dios y la raza humana. Y todo el ministerio de Jesús, por lo tanto, es reconciliación, restaurar la humanidad a la correcta alabanza, a la ortodoxia, a la armonía y adoración.